Aída Quintero Dip
Un ambiente de fiesta,
alegría y trabajo reina en Santiago de Cuba, donde se dan los toques finales a
obras y arreglos de áreas para celebrar en una ciudad más limpia, higiénica,
ordenada y disciplinada el aniversario 56 del triunfo de la Revolución Cubana.
Singular ajetreo
caracteriza el entorno del Parque Carlos Manuel de Céspedes, frente al antiguo
Ayuntamiento, en esta urbe, desde donde el Comandante en Jefe Fidel Castro
proclamó la victoria el primero de enero de 1959, ante la euforia de un pueblo
mezclado con los rebeldes que habían bajado de la Sierra Maestra.
El espíritu de
laboriosidad señorea en el Centro Histórico, sitio fundacional de la villa que
el 25 de julio de 2015 llegará a sus 500 años, pero antes, este 31 de
diciembre, será escenario de la tradicional Fiesta de la Bandera, un
acontecimiento patriótico y cultural que es parte de la idiosincrasia de los
santiagueros.
Todos tienen algo
que celebrar este Primero de Enero ya sea personal o laboral, y el pueblo se
siente más estimulado por el advenimiento del 2015 luego de que el General de
Ejército Raúl Castro, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros,
anunciara que Santiago de Cuba celebrará el acto nacional por el aniversario 62
del asalto al Moncada.
Para el periodista
y combatiente jubilado Manuel Antonio Rodríguez, esa confirmación redobló el ímpetu
de los moradores en esta tierra indómita para lucir sus mejores galas en una
fecha tan significativa para la Patria, cuando se reinició la lucha por la
soberanía, paso que propició la alborada de enero.
Es una ciudad
emblemática por su historia, su cultura y su gente, con un quehacer relevante y
pleno de hazañas; ayer en la emancipación, tras la conquista de la libertad
definitiva; hoy, trabajando a brazo partido para engrandecer este pedazo de
Cuba, subraya.
La doctora Ana
Carreras, especialista en Medicina Interna del policlínico de El Caney, destaca
el trabajo creador de hombres y mujeres levantando obras y resarciendo daños en
este 2014, como muestra de que se está dejando atrás las huellas del devastador
huracán Sandy, en 2012, aunque también se sabe lo que queda por hacer todavía,
precisa.
Lo que más llama la atención a la estudiante
de Higiene y Epidemiología, Daineris Danger Segura, es la animación especial
que hay en todas partes, por el quehacer y la alegría que avisan que la
legendaria urbe se prepara para protagonizar otros grandiosos momentos de su
historia.
Cada vez que toca a
las puertas el Primero de Enero hasta la
fisonomía de Santiago de Cuba cambia, acrecienta el patriotismo de su población
cercana a los 500 mil habitantes, reafirmada como un reservorio de valores que
seduce a quienes la pueblan y también a los que la visitan.